Estamos contigo como referente en la movilidad urbana en Cercanías, la conexión regional en Media Distancia y la mejor opción de viaje en trenes de Alta Velocidad y Larga Distancia.
Como sociedad filial del Grupo Renfe nacemos en 2013 como operador de transporte de viajeros y prestador de servicios turísticos.
Casi 40 millones de viajeros utilizan los servicios de alta velocidad al año en España. La modernización de nuestro ferrocarril en gran parte del territorio peninsular en servicios de Larga y Media Distancia supone una red de alta velocidad que se ha desarrollado en conexión con la red convencional. La evolución a lo largo de estos años sitúa la cifra acumulada de viajeros que han utilizado la red de alta velocidad en España en más de 400 millones de viajeros.
El tren es, 28 años después del primer servicio de alta velocidad, el principal modo de transporte colectivo elegido en España para trayectos peninsulares de larga distancia.
Las implicaciones que genera este hecho están conectadas con el sector industrial y ferroviario español, referente mundial, con el sector turístico, donde España es un referente internacional, y con una economía baja en carbono, además de la seguridad, la fiabilidad y la puntualidad de unos servicios que aportan al usuario valor añadido.
El efecto que la ampliación de la red de alta velocidad ha generado progresivamente hace que, junto a los millones de viajeros anuales en servicios Ave, el 65% de los viajeros de larga distancia en servicios que circulan por la red convencional utilicen parcialmente la red de alta velocidad, diseñada para conectar puntos finales en los corredores no completados aún.
La velocidad comercial media de los servicios por la red de alta velocidad española es de 222km/h, superior a la registrada en países pioneros como Japón o Francia. Se trata de uno de los factores tecnológicos clave de esta transformación.
El ferrocarril es uno de elementos centrales para una economía baja en carbono y para reducir las externalidades que causa el transporte, evitando costes y reduciendo emisiones.
Este desarrollo tecnológico ha situado al sector ferroviario español y al sector industrial vinculado a él en la vanguardia del mercado mundial de la alta velocidad. Renfe y Adif lideran en materia de interoperabilidad y sistemas de señalización y circulación. España es el país con mayor grado de implantación del sistema de gestión del tráfico ERTMS, el estándar más avanzado definido por la Unión Europea para el bloque comunitario, tanto en vía como a bordo de los trenes.
El desarrollo de la alta velocidad ha permitido exportar este conocimiento y tecnología a países como Arabia Saudí o Estados Unidos para el diseño, construcción y operación de servicios de alta velocidad.
El crecimiento de la demanda en los servicios de alta velocidad es consecuencia los factores que la distinguen (velocidad media, seguridad, confort, fiabilidad y puntualidad) y de un esfuerzo de servicio. La extensión de la red y el aumento progresivo de los servicios de alta velocidad de Renfe se han desarrollado manteniendo unos niveles de calidad percibida de notable y por encima de la media dentro del sector del transporte.
Cercanías, con sus núcleos en grandes ciudades, conforma una red esencial para la movilidad urbana e interurbana y permite que más de un millón de viajeros se desplacen a diario a través del ferrocarril de proximidad.
La concentración de contaminantes en las ciudades genera un reto al que el ferrocarril de Cercanías puede dar respuesta. La Comisión Europea reconoce que el Transporte es la asignatura pendiente de la descarbonización en Europa. La movilidad es el sector que genera más gases de efecto invernadero con un 27% del total de las emisiones de la UE.
Nuestro objetivo es incorporar más clientes a un transporte sostenible como el tren urbano, mediante un esfuerzo de gestión y modernización, permitiéndoles reducir su huella particular de carbono, su impacto ambiental, y aumentar la sostenibilidad de los desplazamientos y de los negocios.
Renfe cuenta con un total de 12 núcleos de Cercanías en Madrid, Barcelona, Valencia, Sevilla, Bilbao, San Sebastián, Murcia-Alicante, Cádiz, Zaragoza, Málaga, Cantabria y Asturias. Más de un millón de viajeros diarios y más de 400 millones de viajes anuales contribuyen a la descontaminación de nuestras grandes ciudades.
El tren es el gran aliado en la lucha contra el calentamiento global y por una movilidad más sostenible. No sólo es el medio ideal para sustituir al avión y al coche en los desplazamientos de larga distancia si no que, más importante aún, tiene por su capacidad y su eficiencia en el consumo un papel central en la articulación de la movilidad de cada día: la de las grandes ciudades y los millones de desplazamientos de corta y media distancia que realizamos cada día para trabajar, estudiar y el resto de rutinas.
Hemos invertido 3.000 millones de euros en la compra de nuevos trenes para renovación integral de la flota que Renfe destina a la prestación de servicios públicos, es decir, los trenes de Cercanías y Media Distancia.
El 14 de diciembre de 2016, el Parlamento Europeo aprobó el Cuarto Paquete Ferroviario, el marco de una reforma ferroviaria para mejorar la eficiencia y la competitividad del ferrocarril en toda la Unión Europea y, al mismo tiempo, eliminar los actuales obstáculos institucionales, jurídicos y técnicos, creando una red ferroviaria europea plenamente integrada y liberalizada.
La liberalización contemplada en el 4º paquete ferroviario ya ha sido transpuesta a la legislación española. En concreto, el Real Decreto-ley 23/2018, del Sector Ferroviario, que marcó el mes de diciembre de 2020 como fecha de inicio para la entrada de nuevas empresas ferroviarias en el transporte de viajeros por ferrocarril en los servicios de larga distancia y alta velocidad.
A partir de dicha fecha, cualquier empresa que disponga de la licencia de empresa ferroviaria y del certificado de seguridad, que otorga la Agencia Estatal de Seguridad Ferroviaria, y haya solicitado el uso de la infraestructura ferroviaria, podrá prestar servicios en competencia con Renfe.
Para organizar este nuevo entorno, el Administrador de Infraestructuras (Adif) seleccionó tres corredores ferroviarios (Madrid-Barcelona-Frontera Francesa, Madrid-Levante y Madrid-Toledo - Sevilla- Málaga) y para cada uno de ellos tres niveles diferentes de capacidad de operación, categorizados como paquetes (A, B y C).
El el 27 noviembre de 2019 Adif realizó la preadjudicación de los diferentes paquetes de la siguiente forma:
Esta apertura del tráfico en España conllevará un incremento del 65% en la capacidad ofertada: habrá un alza del 50% en el Madrid-Barcelona, del 40% en el Madrid-Levante, y del 60% en el Madrid-Sur.
En cuanto a los servicio sometidos a Obligación de Servicio Público (Cercanías, Media Distancia Convencional, Alta Velocidad Media Distancia (AVANT) y Ancho Métrico), la normativa europea permite a los Estados Miembros optar porque los servicios OSP no sean licitados obligatoriamente hasta 2023, período que puede ampliarse si existe un contrato vigente a dicha fecha.
El mercado de transporte ferroviario de mercancías inició su liberalización en España en 2005, si bien no se produjo la entrada efectiva de otras empresas ferroviarias privadas hasta 2007. El sector opera en régimen de libre competencia.